Desde 2008 Duché se dedica a la fabricación de esencias y concentrados que permitan a las personas interesadas en postres, confitería, helados, pasteles o comida salada ofrecer creaciones que cumplan con lo que el Instituto Internacional del Gusto (International Taste Institute) considera como los cuatro básicos para que un producto tenga un buen sabor: aspecto visual, sabor, aroma y textura. La clave está en la calidad y la coherencia entre lo que se ve, se huele y se degusta.
Según The FoodTech y algunos otros expertos consideran que las esencias y saborizantes “son una herramienta fundamental para la innovación de productos” y es que gracias a las posibilidades que brindan la industria de alimentos y bebidas se ha desarrollado, por ejemplo, nuevas bebidas con sabores casi naturales y sin colores; o postres que resultan irresistibles a primera vista y cuando se prueban son aún más aplaudidos. Incluso, las esencias y concentrados, al no contener azúcar son una buena opción para aquellas personas que están guiadas por un profesional de la nutrición en las dietas bajas en carbohidratos.
En entrevista con la gerente de nuevos productos de Duché, la Ing. Arelia Garduño, compartió que lo primero que se debe saber antes de decidir si utilizar una esencia o un concentrado es la diferencia entre estos dos productos: “Las esencias son solo sabor y aroma. Se puede usar en agua o leche; en gelatinas florales y artísticas; hay gente que usa para cremas batidas o rellenos en pastelería o bombones”, agrega también que el sabor de las esencias es más sutil por lo que se puede usar hasta 10 ml por litro de preparación”. Los concentrados son muy utilizados por las pastelerías, heladerías y personas que buscan tener todo en un mismo producto: sabor, color y aroma. Nuestra entrevistada comparte que, “como su nombre lo dice, son más concentrados los sabores, por ello es que se deben usar entre 3 y 5 ml por litro, porque si no se amargan las preparaciones”.
Gran variedad de sabores
Concentrados: Amaretto, Café, Cajeta, Capuchino, Chicle, Chocolate, Cocada, Coco, Frambuesa, Fresa, Frutos rojos, Grosella, Horchata, Jamaica, Limón, Mango, Maracuyá, Mora azul, Naranja, Nuez, Piña, Plátano, Queso, Rompope, Uva y Vainilla.
Esencias: Almendra, Anís, Café, Cajeta, Canela, Cereza, Crema Irlandesa, Chocolate, Coco, Durazno, Frambuesa, Fresa, Guanábana, Guayaba, Grosella, Jerez, Limón, Mandarina, Mango, Manzana Verde, Maple, Menta, Mora Azul, Naranja, Nuez, Piña, Pistache, Plátano, Rompope, Sandía, Uva, Vainilla.
Oleosas: Mantequilla, Mantequilla Naranja, Mantequilla Vainilla, Chocolate, Fresa, Leche condensada, Nata y Nuez.
Además de las ventajas en cuanto garantía en inocuidad y seguridad alimentaria, alto rendimiento y buena relación precio–calidad, la ingeniera Garduño comenta que tanto las esencias como concentrados de Duché están alineados con las nuevas tendencias del mercado que buscan cada día productos que se acerquen más a lo natural, con la ventaja de que al ser mezclas de aromáticos realizadas en el laboratorio estas no contienen los alérgenos de las frutas o de la nuez, por ejemplo. De tal modo que muchas personas que presentan intolerancia a estos alimentos podrían comer postres con sabor muy cercano sin que resulte una amenaza para su salud. Por supuesto que será necesario que se consulte al médico especialista para que dé su recomendación en cada caso. La entrevistada, quien es alérgica a ciertos alérgenos de las fresas, comparte puede comer gelatinas de Duché con este sabor sin presentar ningún síntoma.
Para poder identificar un buen producto, la gerente comenta: “El aroma es un identificador de la calidad. Si huele artificial, sabe amargo o sabe muy fuerte o rancio, identificas que no es un buen producto. En Duché sabemos cómo hacer las mezclas de aromáticos y en el caso de los cítricos (limón, mandarina y naranja) usamos aceites de las cáscaras. También manejamos una buena caducidad (3 años). En realidad, después de esos tres años el sabor comienza a perder potencia, igual que con los perfumes”.
Duché cuenta también con una línea de concentrados, oleosas, para panificación cuya base no es alcohol, lo que les permite que el aroma y el sabor no se evaporen en altas temperaturas y resultan los favoritos de muchas panaderías reconocidas en nuestro país y de reposteros en México y EUA. En estos productos la recomendación es el uso de 5 ml por litro de masa, ¡el alto rendimiento y el gran sabor es una de sus mayores ventajas! Lee una historia sobre estos productos aquí.
En mayo se amplió la línea de concentrados con más sabores y aquí puedes leer el artículo sobre el tema.
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