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Akita de 20 años, Luka, un fiel protector y compañero


Esta es la historia de un Akita de alrededor de 20 años; Luka tuvo una sobrevida y de calidad y es un ejemplo de cómo es que podemos prevenir que los perros viejos tengan padecimientos y dolores, lo importante es suplementarlos de manera correcta y siempre estar al tanto de su alimentación, por supuesto, con la guía de los médicos especialistas. Gelipet es un buen aliado para ello.

La M.V.Z. Rocío López rescató a LuKa hace 15 años, “creo que tenía entre 4 o 5 años y lo rescaté en muy malas condiciones, estaba todo navajeado; se quedó como guardián de la Clínica Meba con la condición de que no se comiera a los gatos y ha sido el mejor perro del universo; lo entrené para obediencia gruñir y ladrido con orden, pero ya lo traía, porque es algo que traen los Akita. No le quisimos manejar guardia para que no fuera muy agresivo”, nos platica la doctora.

Hace seis años a Luka se le empezó a suplementar con colágeno hidrolizado, entonces la doctora López no conocía Gelipet, mas conocía lo beneficios de que este suplemento podría traerle a un perro para prevenir ciertos padecimientos y para prolongar su calidad de vida. Desde hace dos años Luka es un fiel consumidor de Gelipet, además de otros suplementos que han ayudado a que sea un perro que no tiene dolores articulares, que no ha presentado ningún síntoma de demencia senil y que sigue teniendo apetito, aunque ahora por viejito ya su digestión no es tan buena y necesita de ayuda para poder desplazarse. 

El mejor guardián de Clínica Meba

Mientras escribíamos esta nota sabíamos que era probable que Luka no viviera mucho tiempo más, no porque estuviera enfermo, ya que seguía disfrutando comer y dar paseos, pero era un perro de 20 años que estaba cansado y que, como buen animal viejito, había muchas cosas que ya no podía hacer —o ya no quería, porque pasaba mucho tiempo dormido—. Para un Akita, cuya vida promedio es de 13 años, podemos comprender que haya sobrepasado, y por mucho, su esperanza de vida. Como dice la médica veterinaria y dueña de Luka “a pesar de su vejez es un perro sano. No tiene dolor articular excesivo. No es un perro que esté sufriendo. Pero jamás podría dejarlo que sufra”.

Siempre fue un perro saludable, únicamente enfermó dos veces y, como relata doctora López, “fue porque cuando me fui de vacaciones creía que lo había abandonado y se estaba dejando morir”, así como cuando se mudaron a otro espacio para poner la clínica, también se deprimió mucho porque siempre entendió que SU lugar y SU hogar era la Clínica Meba. 

Un Akita con una sobrevida y de calidad como la de Luka es un ejemplo de cómo es que podemos prevenir que los perros viejos tengan padecimientos y dolores, lo importante es suplementarlos de manera correcta y siempre estar al tanto de su alimentación, por supuesto, con la guía de los médicos especialistas. Gelipet es un buen aliado para ello.

Luka estuvo hasta el final en casa de su dueña y amorosa médica veterinaria. El perrito se ha dado a querer tanto que “todos mis clientes lo conocen, lo adoran. Ahorita llegan a la clínica y preguntan primero por Luka y ya luego a lo que vienen. Hay gente que le da las gracias por su acompañamiento”, explica la entrevistada y agrega que cuando ella debía dar la noticia a los dueños de perros que tendría que aplicar la eutanasia, Luka era el primero en ir a consolarlos y hasta hubo ocasiones en las que lamió las manos o quitó las lágrimas de los desconsolados clientes. Pero también la empatía la tuvo con los pacientes porque a los recién operados, por ejemplo, los alentaba para recuperarse, como un enfermero canino.

De entre las muchas anécdotas que nos compartió la doctora fue que cuando Luka llegó le tenía mucho miedo a los marranos que viven en la clínica, pero que ahora hasta estos divertidos animales lo echan en falta. 

“Luka es parte fundamental de la Clínica Meba”, asegura Rocío López, quien está convencida de que su perro ha tenido una gran vida y que ha sido un gran guardián, asistente y compañero. 

Durante la entrevista Luka estuvo ahí, dormido, junto a su ahora guardiana, esperando paciente a que colgáramos la llamada para que, por fin, Rocío continuara leyéndole la novela de terror que a ambos los tenía en ascuas. “A Luka le fascina que le lea, en serio, parece que va entendiendo todo lo que le cuento; es un personajazo, es un gran perro, es MI perro”. Así concluimos la charla y extendemos un cariñoso agradecimiento a Luka por tantos años de servicio, de empatía y de amor.

Así lo queremos recordar siempre, como en este video, feliz, comiendo.

Y, como en cada uno de nuestros Casos de Gelipet, también nos interesa la perspectiva médica de cómo es que el colágeno de alta calidad pudo ser un factor de prevención para que Luka no presentara signos de envejecimiento tempranos ni padecimientos relacionados con el desgaste físico por su edad. 

Ahora la experta y amorosa dueña de Luka nos explica con mayor detalle este tema:

El Colágeno Hidrolizado es un neutracéutico que ayuda a retrasar los signos de la edad, ya que favorece la regeneración y correcto funcionamiento de todos los tejidos, órganos y sistemas del organismo, absolutamente todos. En el caso de Luka cuando llegó a la etapa de perro geriátrico, a los nueve años, se le comenzó a cuidar la alimentación y la suplementación buscando, exactamente eso, retrasar el envejecimiento y darle una mayor calidad de vida en sus últimos años, que honestamente, jamás esperé que fueran tantos. 

Ahora, vamos por partes. En un perro talla grande como Luka, que era un Akita, lo que más problema causa en la etapa geriátrica son las articulaciones, el sistema nervioso y el gastrointestinal. 

En cuanto a las articulaciones es completamente normal que haya un desgaste de las superficies articulares por el uso, la edad y el peso del animal, lo cual, eventualmente, causa molestia o incluso dolor, disminuyendo la calidad de vida de los pacientes y restringiendo la movilidad y pudiendo llegar a incapacitarlos para pararse, caminar o realizar sus funciones y actividades diarias. Al administrarse el colágeno hidrolizado vía oral lo que sucede es que estas superficies articulares, al igual que todos los tejidos involucrados en la articulación, como son huesos, tendones, ligamentos, músculos, capsula articular… se regeneran al mismo tiempo que se desgastan, por lo cual ese equilibrio no se pierde y se mantienen funcionales y sanos por mucho más tiempo. 

Lo que sucedió con Luka es que a su avanzada edad, aun sin tener dolor, desgaste articular excesivo, incluso sin presentar siquiera crepitaciones articulares, es que ya estaba débil y cansado, razón por la cual en ocasiones le costaba trabajo pararse o se caía con facilidad; por ello, además de todo lo que ya se mencionó, decidí ponerle un arnés, que me facilitaba la tarea de poder ayudarle a pararse o caminar sin problemas, asistido por mí, obvio. Pero efectivamente, la suplementación con colágeno hidrolizado evitó y retrasó el desgaste normal de las articulaciones, anulando cualquier dolor derivado de ello y dándole una sobrevida de alta calidad a mi niño.

En cuanto al sistema nervioso, y esto independientemente de la raza o el tamaño, cuando un animal es sumamente longevo es muy común que tenga o padezca una patología llamada disfunción cognitiva, que es una especie de demencia senil similar al Alzheimer en humanos. Esta patología se debe a una pérdida de masa encefálica que ocasiona una falla en las conexiones neurológicas y a su vez pérdida de la memoria e incluso de la realidad, ocasionando que el animal no reconozca al dueño, su hogar, o a sus compañeros caninos; esto le causa ansiedad e incluso depresión. Igual que en el resto de los tejidos, órganos y sistemas, lo que produce el consumo vía oral de colágeno hidrolizado es el retraso del envejecimiento, dando lugar a la óptima regeneración y funcionamiento de los tejidos, evitando o posponiendo su desgaste normal debido a la edad y al uso. 

En el sistema nervioso, tanto central como periférico, la suplementación favorece la mielinización de los axones y dendritas en las neuronas, agilizando la transmisión nerviosa y manteniendo la respuesta adecuada a ciertos estímulos, además de estimular la formación y establecimiento de nuevas sinapsis entre neuronas y ayudando a la formación de neurotransmisores y receptores para los mismos. Además de nutrir y mantener sanas las neuronas y las estructuras involucradas, fortaleciendo el correcto funcionamiento de todo el sistema, no únicamente en cuanto a lo cognitivo, sino en todos los niveles fisiológicos y psicológicos. 

Sobre el sistema gastrointestinal; es muy común que en animales rescatados haya ciertas debilidades o fallas digestivas, ya que los animales al sufrir maltrato, abandono o al haber vivido en las calles comen lo que encuentran, sin importar si no es comestible o está descompuesto, esto causa daño a los tejidos gástricos ocasionando problemas a largo plazo. Cuando se rescató a Luka, su sistema gastrointestinal estaba sumamente dañado, tenía diarrea crónica con sangre además de una parasitosis severa, en aquel momento se hizo lo necesario, médicamente hablando, para regenerar sus tejidos gástricos e intestinales y desparasitarlo; pero siempre quedó “sensible” del estómago. Al iniciar con la suplementación de colágeno hidrolizado éste favoreció enormemente la reparación y funcionamiento gastrointestinal, desapareciendo dichas “sensibilidades”, lo que facilitó poder consentirlo con huesos y premios fuera de su dieta; sin embargo, en sus últimos dos años el sistema digestivo volvió a debilitarse, esto debido a su historia y vida anterior, imposibilitando que comiera nada fuera de su dieta, ya que esto le ocasionaba problemas. A pesar de ello, sí se le daba únicamente su alimento y algunos premios específicos que no alteraran dicho equilibrio, él no tenía problemas, y considero que gracias a la suplementación él jamás perdió el apetito ni sufrió de trastornos digestivos severos, a pesar de su edad e historia de vida. 

Así que, para resumir, la suplementación de colágeno hidrolizado vía oral, de manera preventiva y no correctiva, permitió que Luka tuviera una vejez sin contratiempos ni enfermedades graves, sin dolor ni ansiedad, además de que le brindo una sobrevida considerable, tomando en cuenta el promedio de vida de un animal de su talla y peso. Creo que el haberle dado este nutracéutico fue una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida porque él fue uno de los seres vivos más importantes y representativos con los que he tenido la dicha de compartir lo que amo, mi clínica, mi trabajo y parte de mi vida.