Mejorar tus hábitos alimenticios puede ser tan sencillo o complicado como quieras hacerlo. El punto fundamental es analizar cuál es tu relación con la comida. Es decir, ¿por qué comes cuando comes? Una vez que puedas detectar si comes por hambre, por ansiedad, por miedo, por darte un “premio” o, al contrario, por una sensación de “castigo. Nada de esto debe juzgarse, únicamente toma nota y verás cómo poco a poco serás más consciente de lo que comes y las cantidades. Esto es uno de los principios básicos de ciertas corrientes sobre alimentación consciente. También puedes identificar las creencias que hay alrededor de la comida o de ciertas rutinas; por ejemplo, comer entre comidas, hoy en día es una de las cosas que más especialistas en nutrición recomiendan porque: ayuda a mantener activo tu metabolismo, a controlar tu ansiedad y por ende es posible que tu peso se regule. Brincarse el desayuno o la cena no son la mejor de las opciones para bajar de peso, al contrario,